Electroterapia

Estas corrientes poseen la cualidad de provocar un marcado efecto analgésico, en especial las cuatro primeras aplicaciones; son perfectamente toleradas por los pacientes y no tienen ninguna acción secundaria nociva.

Son un tipo de corrientes eficaces y fáciles de aplicar. Las corrientes galvánicas pulsantes tienen efectos analgésicos tanto en corrientes de baja frecuencia como en aquellas de frecuencia media entre 1 a 10 Kz. la ventaja añadida es que no se producirán efectos químicos y podremos además obtener una buena estimulación muscular.

Sus propiedades son:

• Reafirma el tejido
• Suaviza las terminaciones nerviosas
• Reduce el enrojecimiento
• Suaviza y relaja el tejido
• Irrita los folículos y estimula las células ayudando a hacer líquidos los depósitos grasos para poderlos extraer con facilidad
• Incrementa la irrigación sanguínea para ayudar a nutrir la piel

La electroterapia permite estimular selectivamente las fibras nerviosas aferentes mielinizadas (fibras nerviosas gruesas), originando: una disminución del dolor y una normalización del balance neurovegetativo, con relajación y mejoría de la circulación.

La estimulación de las fibras nerviosas aferentes gruesas tiene un efecto inhibidor o bloqueante sobre la actividad de las fibras aferentes finas, y en consecuencia la percepción del dolor disminuye o se anula por completo.

Se destina a la electroestimulación neuromuscular siempre que no estemos ante procesos patológicos, o si existen, que sean muy moderados.

Consigue la respuesta de grandes masas musculares, regula la intensidad lo máximo posible, pero evita riesgos de calambres o roturas musculares.

Es una de las técnicas de electroterapia más extendidas en centros públicos y privados de rehabilitación y Fisioterapia. Incluso para aquellos casos en los que el paciente tolera mal el calor, los equipos actuales se pueden utilizar de forma pulsada.

T.E.N.S. o Electroestimulación percutáneade los nervios, es un aparato para la aplicación de corriente eléctrica a través de la piel para controlar el dolor. El TENS es un método no-invasivo, muy seguro para reducir el dolor, tanto agudo como crónico.